Lo que realmente sentimos
- Alejandra Rivas
- 28 may 2015
- 2 Min. de lectura

¿Qué esconde una sonrisa? ¿Qué sentimientos esconden las palabras? ¿Qué hay detrás de una lagrima? Todos los días nos expresamos pero no siempre mostramos lo que realmente sentimos, decidimos guardarlo para nosotros mismos, quizás esta sea la parte en la que un pasado lleno de desilusiones se haga presente, ese pasado que te dejo una etiqueta de “acumulador de pensamientos y sentimientos” que por tiempos olvidas que la tienes, pero sigue ahí pegada a ti. ¿Sabes cuándo tu presente se ve impactado por tu pasado? Cuando encuentras personas que realmente se interesan por conocer hasta lo más mínimo de ti, seguramente te has topado con una persona así… Piensa bien… Esa persona que te lee el alma, que nada pasa desapercibido, conoce el tono alegre o triste de tu voz y con tan solo un “hola” puede identificarlo, hasta sabe tu manera de escribir y no solo reconoce cuando tu “estoy bien” es todo lo contrario sino que también reconoce cuando tu “nada” es un “mega todo”, esa persona que está dispuesta a escuchar una voice de 15 minutos a las 3 de la madrugada y aun así sabe darte palabras de aliento, esa persona que te quita 3000 kilos de mentiras de encima porque sabes que no puedes mentirle y que tampoco hace falta poner mascaras de sonrisas. Como dicen por ahí “no puedes ser fuerte con alguien que es tu debilidad” y todas tus fortalezas se vienen abajo porque sabes que aunque sea un mal día esa persona tiene las palabras que anhelas escuchar, y es ahí, en ese preciso momento en el que tu presente es impactado, cuando te das cuenta que ya no tienes que fingir, que puedes ser tú mismo y aun así serás amado, que puedes abrir las páginas del libro de tu vida, leerlas y saber que serás escuchado, y ese nivel de comprensión nadie lo entenderá… Ni siquiera tú mismo.
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